El hombre en el castillo es una novela sobre historia alternativa escrita por Philip K. Dick. Publicada en 1962 y premiada con el Hugo de 1963, sirvió para consolidar la carrera del autor y popularizar este subgénero dentro de la ciencia ficción, Aunque no es la primera novela ucrónica, sí es una de las más representativas y ha influido en multitud de obras posteriores. Recientemente, en 2015, Amazon produjo y emitió una serie basada en esta novela.
Los Aliados han perdido la guerra, Japón y Alemania, victoriosos, se reparten el mundo. EEUU, después del asesinato del presidente Roosevelt, siguió una política aislacionista. Hoy, derrotado, está divido en zonas de influencia, el oeste dominado por Japón y el este por Alemania, entre medias, un montón de estados títeres. Quince años después de la victoria de las potencias del Eje, el mundo vive inmerso en una Guerra Fría entre dos países antaño aliados, Japón y Alemania.

Dentro de la novela se mencionan dos libros: otra novela, La langosta se ha posado, una ucronía sobre un mundo donde Japón y Alemania han perdido la guerra, y el I Ching, un libro de origen chino usado para hacer cábalas y adivinaciones, consultado por varios personajes dentro de la historia a modo de oráculo. La trama gira alrededor de estos dos libros y la búsqueda del autor de La langosta se ha posado, que progresivamente se convertirá en una reflexión, tan común en la obra de Philip K. Dick, sobre qué es real.
La historia la escriben los vencedores. Los vencidos asumen su derrota y la ideología del vencedor. Esto se ve claro con la pasión de los japoneses por coleccionar 'antigüedades' estadounidenses. Lo que antes eran objetos comunes y corrientes, hoy son piezas de coleccionista. Este tema también nos lleva a otra reflexión importante: qué es falso y qué no lo es, ¿cómo distinguirlo? La novela es un juego de espejos, donde aparece una ucronía dentro de otra ucronía, como si fueran unas matrioskas, y donde la realidad no es un absoluto.